Gmunden, un blanco destino austriaco para Navidad
Los verdes y espectaculares paisajes estivales de la villa austriaca de Gmunden se vuelven blancos los meses de invierno, ofreciendo una estampa de lo más navideña.
Gmunden es una preciosa localidad austriaca situada a los pies del gran lago Traunsee, en el distrito del mismo nombre. Pertenece al estado de Alta Austria, y limita con otros bonitos municipios, como Altmünster, Pinsdorf, Ohlsdorf, Gschwandt, Sankt Konrad, Scharnstein, Grünau im Almtal o Ebensee. La bella ciudad de Salzburgo se halla 58 kilómetros.
Antiguamente en esta población se producía una gran cantidad de sal, pero hoy en día se ha transformado en una turística cuidad-balneario. Paseando por sus calles descubriremos lugares tan interesantes como su ayuntamiento renacentista, con un original carillón de cerámica, o la preciosa Explanada, un paseo junto al lago desde el que se contempla la joya local, el palacio de Orth.
El clima de tipo continental de la zona proporciona a esta villa austriaca unas temperaturas algo extremas. Por eso los veranos son frescos, con una temperatura media de 18 grados, y los inviernos son fríos, con abundancia de nieve, siendo la media de menos de 0 grados.
Qué ver en Gmunden
El lugar más espectacular de Gmunden es el castillo-palacio de Orth, que fue construido sobre un islote unido a tierra por una pasarela de madera. Es uno de los lugares favoritos de los austriacos, y cada año más de 300 parejas se casan en él.
Otro lugar representativo de esta localidad es la Esplanade, o Explanada en castellano. Se trata de un paseo de dos kilómetros que transcurre junto a la orilla del lago Traunsee. Se extiende desde la plaza del Ayuntamiento hasta el puerto y la playa del lago, y está rodeado de árboles y flores.
Una interesante visita es la que ofrece el Kammerhofmuseum, un museo que se encuentra ubicado en el antiguo edificio de administración de las minas de sal. En la actualidad alberga gran cantidad de información sobre Gmunden y toda su región. En cuanto a los edificios religiosos, mencionar la Iglesia de la Asunción, que es de origen gótico, pero fue restaurada en el siglo XVIII según el estilo barroco.
Cosas que hacer en Gmunden en verano e invierno
Gmunden es una ciudad rebosante de luz y color, y que posee algunas de las mejores playas de lago de toda Austria. Por eso es un estupendo destino en verano, cuando se pueden recorrer sus bellos paisajes, situados en la vertiente norte de los Alpes, haciendo senderismo, en bicicleta o a caballo. Desde aquí también se pueden realizar varias rutas históricas, como la del Camino de los Milenios.
Un buen plan en verano consiste en realizar una excursión por el lago Traunsee hasta Ebensee en el barco Cisela. Se trata de la misma embarcación que llevó a bordo al emperador Francisco José en 1872, aunque lógicamente está perfectamente restaurado.
En invierno, el paisaje se vuelve blanco, ofreciendo unas estampas de la ciudad y del lago realmente inolvidables. Si somos aficionados a los deportes blancos, a menos de 60 kilómetro se halla la Estación de Esquí de Gosau. En Navidad se montan en la vilal dos encantadores mercadillos, uno en las calles de centro histórico y otro en el interior del palacio de Orth. Y en cualquier época del año es muy recomendable la visita a la fábrica de cerámica de Gmunden, que lleva en funcionamiento desde el siglo XV.
